miércoles, 24 de febrero de 2010

Feria de ARCO: Notas al margen

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-------ARCO: Notas al margen

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Por L. Santiago Méndez Alpízar / Chago

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Ayer publicaba algunas de las malas fotos que con mi camarita y durante tres días fui acopiando en la Feria ARCO. Siempre me produce un claro bienestar rondar el majestuoso laberinto de IFEMA en la feria de arte contemporáneo más importante de España, una de las mayores del mundo, seguramente.

Encontrarme con nuevos artistas y amigos de años: la feria es también esperada para el encuentro.

Millonarios con guías personalizados salen como aves de presa tras la obra maldita: los ves por pequeños momentos rellenos de sensaciones que calman a golpe de talonario. Tiranizados por la impotencia , el desosiego, otros no se conforman con el lamento, la pérdida de algunos minutos que le sobraron al afortunado que se anticipó: "llevadme ante el artista; esté donde esté. Ahora"

Este año la primera cirigaña , el primer rife y rifa y las primeras quejas fueron a cuenta del pillo Merino. Con una serie de obras que picaban en temática judía, uno o dos días antes de abrir las puertas al público la feria, el Consulado israelí hacía el ridículo, una vez más, y sacaba sus conclusiones sobre la libertad de expresión. Daba el mantequilloso Gobierno de Israel aviso oficial a la prensa e incluía su desprecio por valor tan fundamental: la libertad de expresión.

Aclaraba el artista Merino su poca disposición para la ofensa en el propio medio, El País. y agregaba la alta ingenuidad con la que funciona.

Me ahorro hablar de las obras de Merino, en mi modesta opinión, muy bien escogidas, pensadas para una feria contestataria, dicho sea de paso y como dijo algún anónimo conocido -ya no es oxímoron, los tiempos hacen valer las aparentes incongruencias- en éste sitio, más progre que nunca en su existencia toda la feria del 2010. Y edición más conflictiva, posiblemente.

Intentar dar espacio al arte de minorías y ocupar presente mediante la participación de aislados casos que sobreviven como argumento de documentales exóticos, material de mercandansing con mensaje tendencioso, visiblemente afectado.

Reagrupar un solemne grito de connotación progre - costoso aullido de factoría zurda- parecía en conjunto, y salvando los gorditos pelones de Botero, algún autorretrato -la obra más cara de la feria- del singular Baicon, o los abundantes garabatos coloridos de Miró, vamos; los de siempre. ARCO semejaba ser más una feria Ink -tanto que trajeron a tatuadores y máster del body percing- que lo que es, o pretende ser en realidad.

Con un día menos de duración y padeciendo España la crisis que se dice, los responsables quedaron satisfechos por superar el volumen de venta supuesto, sin embargo.

Como dato curioso leí que fueron los coleccionistas españoles los que se dejaron los euros: España es un vasto receptor del confort generado por los esfuerzos liberales, pero que se siente comprometida en su mayoría por un sentimiento redentor, si bien no estoy seguro sea venganza, sí de justicia, y de culpa con su Historia reciente. Cada día la tercera república es más intangible a la vez que se desliza hacia una zona notoria: el sentimiento.

Territorios bien definidos otrora, ahora se confunden mensajes en espacios de poder que trasgreden el rigor, o por lo menos, no se ciñen al círculo de la profesión. Sino que llegan a cuestionar la propia tradición y la posible politización de la existencia toda. Bastará con mirar al Torero José Tomás con una Camiseta del Che Guevara posando. O algunos anticuarios en una feria de Arte Contemporáneo, de vanguardia. (Que aquí ya me río, pero es cierto)

O a Tania Bruguera eligiendo para la ocasión, según sus propias palabras, una réplica del célebre cartel robado y recuperado de la entrada al Campo de Concentración en Auschwitz. (Cuánta culpa puede albergar el esqueleto de Marcel Duchamp. Cuánta metáfora regaló para los siglos venideros el normando. Cuánta vitalidad para un artista nacido en el XIX)

Las lúgubres embarcaciones de lujo que la Marlborough le compra a Kcho y vende a 40 lucas: no sin antes intentar colocarte el mismo Tomás Sánchez de 280. 000 euros que, cosa curiosa, va subiendo el precio con cada feria que no se vende.

Nada más representativo que el stand de la Marlborough para comprender los tiempos que vivimos, la propuesta de ARCO, su directiva. La ¿imposible? convivencia de Julio Larraz y el propio Alexis Leyva.

Feria para recompensar la constancia de un remordimiento, quizá. Para diseñar un producto con corazoncito espinoso. Siempre inaugurada por la realeza y destinada a la burguesía. Quiero decir, a los coleccionistas, fundaciones, museos... Pero que pretendió un lazo con la inmediatez e intenta mostrar el otro lado del mundo. ¿La otra cara del coleccionista?

¿Feria para nuevos ricos de izquierda?

No sé, pero sí que notables ausencias y revolicos varios la colmaron como un subtema. Aunque fuera quedaran más galerías que nunca y el metro cuadrado estuviera por las nubes, la sensación que me produjo fue pobre, que también intuyo un propósito. ¿IFEMA de ARTE Pobre?

O la increíble devaluación del arte mexicano, a quien no dieron ni el más mínimo espacio, aun cuando no hace tanto fuese el propio México el país invitado.

En fin, que en España hay crisis pero el arte más revolucionario, por suerte para el negocio se sigue vendiendo. Las metralletas y demás utensilios bélicos siguen de moda. La provocación gana al talento.El artista pone en manos del galerista la variante más cercana a los conflictos que los medios de difusión bombardean: nada de experimentos estéticamente artísticos. Todo lo contrario: ensayos garantizados con un único compromiso visible: que sea vendible. O por lo menos, que la propuesta cree suficiente alboroto. Que traiga a la TV.

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Imagen tomada de la Web.

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4 comentarios:

  1. Gracias por tu reportaje Chago, que nos permite ver la feria por tus ojos acucisos y cuestionadores.
    Me parece lamentable el reclamo de la embajada israeli ante la obra de Merino. Lo m'as interesante es "que ha sido vendida por 45.000 euros a una coleccionista judía de Bélgica", como indica la nota de El Pa'is...

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  2. Sí Rafa, fue una judía belga la que, antes de ser mostrada, ya había apalabrado la obra. Ella no sabemos, tadavía, quién es. Pero no creo que el secreto dure mucho. No obstante, una feria como ARCO tendría que replanter algunos apectos fundamentales. Hay una breve entrevista al director del muséo Reina Sofía, que está muy bien. Salió en TV Española, si encuentro el link al vídeo te lo paso.

    Gracias por tus opiniones. Fuerte abrazo.

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  3. Chago y tu no comentas sobre la muerte de Zapata Tamayo? Por supuesto no estas obligado,es solo curiosidad de mi parte.

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